La imagen del Athletic
Confieso que me ha dado un cierto reparo ponerme a escribir estas líneas porque sé que pueden levantar ampollas en algunos sectores de la afición del Athletic que propugnan que cada cual puede hacer lo que le da la gana en los aspectos a los que me voy a referir, así que antes de nada, voy a remitirme a un párrafo escrito en la sección "Txoko de los socios", dentro del apartado "Asistencia de socios/as al palco de honor", y en el que se establecen las condiciones para poder acudir y codearse con los directivos, el presidente y los demás invitados a la zona más exclusiva de San Mamés. Dentro de esos requisitos se establece que para asistir al Palco de Honor es imprescindible ser mayor de edad y acudir con chaqueta y corbata en el caso de los hombres y con atuendo formal en el caso de las mujeres. Es decir, el Athletic pide cierta etiqueta a quienes desean ser invitados, todo lo cual entra dentro de la lógica y la educación que se debe mantener en dicho recinto.
Sin embargo, el club colgó hace unos días en su página de internet algo que titularon como "entrevista a Josu Urrutia", que no es tal puesto que en una entrevista, el entrevistador puede repreguntar y pensar cuestiones sobre la marcha en razón de las respuestas del entrevistado, lo que no ocurría en este caso, donde las preguntas de los socios se filtraban. Era algo más parecido a un consultorio. En fin, un sucedáneo de entrevista. En el vídeo, el presidente del Athletic, que lo es en todos los actos públicos en los que interviene, no mostraba esa etiqueta que exige el club en sus dependencias exclusivas el día de partido. Iba vestido, digámoslo así, de manera muy informal, con un jersey de colores inclasificables y pantalón vaquero, muy lejos de lo que se podría considerar un atuendo adecuado para representar a una entidad tan significativa como el Athletic. De hecho, en vez de máximo representante de la entidad de Ibaigane, parecía uno de los entrevistados en Euskalduna naiz, eta Zu?, el polémico programa de ETB que tantos ríos de tinta ha hecho correr en la última semana. Qué quieren que les diga: a mi me gusta que mi presidente lo sea en cualquier momento y lugar, fuera de sus ratos de privacidad. Soy así de clásico en algunas cosas.
Urrutia aprovechó el mismo atuendo, con el que parece sentirse muy a gusto, para acudir, visto y no visto, a la inauguración de la peña dedicada al recordado presidente Pedro Aurtenetxe, que jamás se apeó del traje en sus comparecencias públicas. Allí se encontró con ex presidentes o ex directivos, o ex jugadores, todos ellos de punta en blanco. Y ninguno representa ya directamente al Athletic. Por cierto, digo lo de visto y no visto porque el acto comenzaba a las 19.30 horas y cinco minutos más tarde ya se había marchado, después de la casi obligada foto de rigor. Urrutia es parte de la imagen del Athletic, tal vez no la más importante, pero sí la más representativa en el ámbito institucional, y debería ser un ejemplo en todos los aspectos de sus comparecencias públicas. Me consta que el presidente ha mantenido desencuentros con alguno de sus asesores precisamente por no mimar ese apartado. Ya sé que llevar traje es un fastidio, pero es una servidumbre más del cargo, que también tiene sus ventajas.
La comunicación pública también es parte de esa imagen del club, y en este aspecto, el Athletic cometió un desliz el pasado miércoles por la noche, cuando en su cuenta oficial de Twitter, apareció un comentario que finalmente ha dado la vuelta al mundo, después de que el FC Barcelona eliminara al París Saint Germain de la Champions tras el 4-0 del Parque de los Príncipes. La inadecuada frase rezaba: Pues a nosotros no nos pareció tan difícil mantener el 4-0 de la ida, refiriéndose a la final de la Supercopa de 2015, con lo que el Athletic se metía de cabeza en camisa de once varas, sin venir a cuento, y menospreciando gratuitamente a otro club, el PSG. Es verdad que a muchos seguidores del Athletic el comentario les pareció sólo una broma –hasta que otro club se ría del rojiblanco en una situación similar–, pero no parece que utilizar un medio oficial del club, tan solemne en otras cosas, sea adecuado. La red social twitter se utiliza para comunicar, dar noticias, expresar sentimientos, lanzar consignas o incluso como recurso literario. Pero también como si se tratara de la barra de un bar, y es en este apartado en el que se puede incluir el tuit rojiblanco. Muy gracioso, sí, aunque en París no piensen lo mismo.